A seiscientos veinte kilómetros al sudoeste de Buenos Aires, frente al lago Epecuén, existió un hermoso castillo edificado en los años ’20. El desborde descontrolado de las aguas en 1985 lo redujo a escombros. Informa la Secretaría de Turismo de la Municipalidad de Adolfo Alsina (Carhué): “Fue un chalet de veraneo que hizo construir la arquitecta francesa Ernestina María Leontina Allaire, casada en su patria con un noble polaco apellidado Mestchevsky, coronel de la Legión Extranjera en Francia, quien falleció durante la 1ª Guerra Mundial. Enterada de las bondades terapéuticas del lago, resolvió trasladarse a Carhué, en donde ya estaba su hermano, propietario del Plage Hotel. Su construcción se llevó a cabo entre 1924 y 1925, convirtiéndose en una postal de la villa. Su parque arbolado contenía una reproducción de la gruta de Lourdes, que junto a la edificación era uno de los sitios más visitados…”
Visité lo que queda de Villa Lago Epecuén en febrero de 2010. El pueblo, que antaño fuera un importante destino turístico, después de la gran inundación ha quedado completamente vacío y blanqueado. Del castillo, que era un palacio en miniatura con varios pisos, torres almenadas y ventanas ojivales, solo hay ruinas.
© 2010, Héctor Ángel Benedetti